El gobierno israelí, bajo el liderazgo de Benjamin Netanyahu, ha dado «luz verde» a su ejército para llevar a cabo una operación militar terrestre en la Franja de Gaza, una región que ha estado bajo un «asedio total» desde el pasado 7 de octubre y que alberga a 2.2 millones de habitantes.
Según informes de los medios israelíes, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, ha instado a las tropas a estar «listas» para una invasión terrestre, aunque no se ha especificado el momento exacto de su inicio. Gallant les transmitió a las tropas: «Pueden observar Gaza a lo lejos, pronto la verán desde el interior. La orden va a llegar».
Por su parte, el ministro de Economía, Nir Barkat, declaró que el ejército se centrará en «destruir al Hamás» y en convertir sus túneles en el «cementerio más grande del mundo», aunque subrayó que se esforzarán por «regresar a los rehenes con vida».
Este anuncio se produce aproximadamente dos semanas después de que comenzara un bombardeo masivo en la Franja de Gaza, que ha cobrado la vida de al menos 3,500 personas, según cifras de las autoridades locales. Las fuerzas armadas israelíes han concentrado sus tropas en los alrededores de Gaza, en preparación para una incursión en el territorio. Netanyahu expresó su apoyo a las fuerzas armadas, diciendo: «Todo Israel está detrás de ustedes».
El anuncio de la operación terrestre en Gaza se produce apenas un día después de una breve visita del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, a Israel, durante la cual reiteró su apoyo incondicional a Netanyahu en la lucha contra el Hamás. Este grupo militante palestino lanzó un ataque sorpresa el 7 de octubre, matando a más de 1,400 israelíes y tomando a 203 rehenes en Gaza.
Estados Unidos también respaldó la versión de Israel sobre la explosión en el hospital Al-Ahli de Gaza, en la que murieron decenas, si no cientos de personas, desencadenando una ola de indignación internacional. Mientras que el Hamás afirmó que la explosión fue causada por un ataque aéreo israelí, los gobiernos de Israel y Estados Unidos mantienen que fue el resultado de un cohete disparado por militantes de la Yihad Islámica que se desvió y cayó en el estacionamiento del hospital.
Mientras se espera que la invasión de Gaza desde el norte ocurra en cualquier momento, las Naciones Unidas siguen teniendo la esperanza de que la ayuda humanitaria pueda comenzar a ingresar al enclave a través de su frontera sur con Egipto a partir de mañana, y han instado al gobierno israelí a permitir el suministro de gasolina. La situación en la región continúa siendo motivo de preocupación a nivel internacional.
